Ilha Grande, ubicada frente a la costa de Río de Janeiro, es una joya escondida que aún no ha sido descubierta por muchos turistas. La isla es conocida por sus playas vírgenes, aguas cristalinas y exuberantes bosques tropicales, lo que la convierte en el destino perfecto para los amantes de la naturaleza y los buscadores de aventuras. Si está buscando un lugar de vacaciones que ofrezca una combinación de relajación y aventura, encontró el lugar correcto. ¡Descubrámoslo juntos!
Un poco de historia
Aunque los primeros habitantes fueron los indios Tamoio, los navegantes europeos llegaron hace más de cinco siglos, concretamente en 1502. Hay una casa que data de 1629 llamada Casa do Morcego, una de las construcciones de mampostería más antiguas de Brasil. A lo largo de los años, varios tipos de personas han frecuentado la isla o se han asentado en ella. Cafetaleros o cañeros, piratas, pescadores y hasta presos, cuando hubo prisión en la playa de Dois Ríos durante el siglo XX.
Hoy en día, los turistas se han convertido en los visitantes típicos de esta isla pesquera de belleza natural virgen. La infraestructura para recibirlos se ha desarrollado con la aparición de numerosos pequeños hoteles y restaurantes, concentrados principalmente en el pueblo de Abraão. Esa es la principal zona habitada de la isla. También es el punto de entrada a la isla, donde desembarcan los barcos de los visitantes. Tenga en cuenta que Ilha Grande es conocida por sus prácticas respetuosas con el medio ambiente. La isla ha logrado preservar su belleza natural implementando estrictas regulaciones ambientales y promoviendo el turismo sostenible. La ausencia de coches y tráfico de vehículos también ayuda a proteger el esplendor natural y salvaje de la isla.
Actividades en Ilha Grande
Una de las mejores cosas de Ilha Grande es su gran cantidad de actividades al aire libre. La isla ofrece una variedad de rutas de senderismo que le llevarán a través de la exuberante selva tropical y de impresionantes cascadas. Podemos mencionar la caminata que conduce a la famosa y hermosa playa salvaje de Lopes Mendes. A los surfistas les encanta ese lugar por las fuertes olas. También está la caminata al Pico do Papagaio (Pico del Loro), uno de los puntos más altos de la isla. Con vistas al pueblo de Abraão, a casi 1000 metros (3281 pies) sobre el nivel del mar, el pico ofrece unas vistas impresionantes que no te puedes perder. Y hay muchas otras caminatas, como la cascada de Feiticeira (bruja), las playas de Dois Rios o Caxadaço. Y créanos, ¡todos valen la pena!
Para aquellos que buscan una experiencia más relajada, las numerosas playas de la isla ofrecen el lugar perfecto para tomar el sol, nadar y bucear. Ilha Grande también ofrece oportunidades para practicar kayak, surf de remo y buceo. También se ofrecen numerosos viajes en barco para visitar las bellezas inaccesibles de la isla. Podrás descubrir tesoros escondidos como las Lagunas Azul y Verde. Sí, ¡ese es el destino ideal para los entusiastas de la aventura y los deportes acuáticos! Por cierto, hablando de deportes acuáticos, escribimos un correo enteramente dedicado a actividades acuáticas en Río de Janeiro. Échale un vistazo si estás interesado en el tema. Además, también tenemos un artículo sobre buceo en Arraial do Cabo. De hecho, es otro lugar perfecto de la región para este deporte.
Acceso en barco y alojamiento
Al ser una isla sin puente hacia tierra firme, el único acceso es en barco. Y hay varias formas de acceder a él. Puedes tomar el ferry desde Mangaratiba a las 8:00 am o Angra dos Reyes a las 15:30 horas. Estos dos pequeños pueblos se encuentran a unos cien kilómetros de Río de Janeiro, en la Costa Verde. En ambos casos, la travesía dura aproximadamente una hora y media y cuesta un módico precio. Pero existe una opción más rápida, aunque más cara, para llegar a la isla. Existe un servicio de lanchas rápidas que salen cada treinta minutos de 8:00 a 18:30 horas. Para tomarlo, dirígete a un barrio de Mangaratiba llamado Concepción de Jacareí. La travesía es más rápida y dura unos veinte minutos. Pero también es mucho más caro que el ferry.
El alojamiento en la isla va desde hostales y casas de huéspedes económicos hasta complejos turísticos y alquileres vacacionales más lujosos. Muchos de los alojamientos se encuentran en el pueblo de Abraão, el centro principal de la isla que ofrece fácil acceso a las playas y rutas de senderismo. También puedes encontrar alojamiento en las zonas más remotas de la isla, que ofrecen una experiencia más apartada y tranquila. Algunos de los alojamientos son ecológicos con prácticas sustentables. En general, las opciones de alojamiento en Ilha Grande se adaptan a una amplia gama de preferencias y presupuestos, lo que lo convierte en un destino perfecto para viajeros de todo tipo.